La trama se desarrolla en tres lugares muy diferentes: la Francia actual, el antiguo Egipto y la antigua Nubia. Egipto es un lugar lleno de obras arquitectónicas muy complejas, a la vez que encierra un gran conocimiento en Alejandría y Nubia es una región semidesértica poblada por indígenas.
La accidental rotura de un amuleto que Carla y su hermano, los protagonistas, encuentran en un sarcófago, desencadena toda la trama.
Los momentos que más me han gustado son las geniales descripciones de los ambientes de las ciudades antiguas, como Alejandría, tan minuciosas que parecen llevar al lector a la ciudad. También me han gustado las descripciones de los sentimientos y pensamientos de los personajes. La única cosa que no entiendo es cómo logran comunicarse todos en el mismo idioma.
En cuanto al resto de la obra, es un libro más con un final feliz.
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